¿Alguna vez has soñado con llevar contigo un recuerdo especial de manera elegante y discreta? ¿Te gustaría tener cerca a esa persona especial, ese momento inolvidable ó ese lugar que te llena de alegría? ¡Tenemos la solución perfecta para ti! Te presentamos tres técnicas increíbles para colocar tu foto favorita dentro de un relicario. No solo podrás llevar contigo ese recuerdo especial, sino que también podrás hacerlo con estilo.

Estas técnicas son sencillas, rápidas y no requieren de materiales complicados. Solo necesitas materiales que de seguro tienes en tu casa, en la comodidad de tu hogar.

Así que, si estás listo para darle un toque personal a tu relicario y llevar contigo ese recuerdo especial, sigue leyendo y descubre cómo puedes hacerlo con nuestras tres técnicas fáciles y rápidas. ¡Vamos a ello!

1era Técnica:

• Materiales:
  • Relicario
    
  • Trozo de papel.
  • Tijeras
  • Lapiz
  • Pegamento liquido o en barra

1.- Abre el relicario con la parte interna apuntando hacia a ti.        

2. Coloca un trozo de papel sobre los espacios donde se ubica la foto. Presionalo para que de esta manera quede la marca del borde del relicario. 

3. Tambien marcar las dimensiones correctas con el lapiz. Delinea los bordes de tu relicario con el lápiz para crear una marca. Esta marca te servirá como guía para saber el tamaño exacto que debe tener la foto.

4. Corta un pedazo de papel blanco siguiendo la marca que has hecho. Este pedazo de papel lo usaras como plantilla para recortar tu foto.

5. Coloca esta plantilla sobre tu foto. Asegúrate de que la parte de la foto que quieres que se vea quede debajo de la plantilla.

6. Usa el lápiz para trazar y marcar los bordes deseados de tu foto. Estas marcas te indicarán por dónde debes cortarla.

7. Corta tu foto siguiendo las marcas que has hecho. Intenta hacerlo con cuidado para que los bordes queden lo más limpios posible.

8. Aplica una pequeña cantidad de pegamento en la parte posterior de la foto. No necesitas mucha cantidad, solo lo suficiente para que la foto se adhiera al relicario.

9. Coloca la foto dentro de tu relicario. Asegúrate de que la foto esté bien centrada y de que se vea la parte que quieres mostrar.

2da Técnica:

• Materiales:
  • Relicario
    
  • Fotocopiadora.
  • Hoja de papel
  • Tijeras
  • Lapiz
  • Pegamento liquido o en barra

1. Coloca tu relicario dentro de una fotocopiadora. La fotocopiadora te ayudará a obtener una imagen exacta del tamaño y forma de tu relicario.

2. Haz una fotocopia del relicario. Esta fotocopia te servirá como plantilla para recortar tu foto.

3. Recorta los bordes de la fotocopia en el lado donde irá tu foto. Intenta hacerlo con cuidado para que los bordes queden lo más limpios posible.

4. Alinea el recorte de la fotocopia con tu fotografía. Asegúrate de que la parte de la foto que quieres que se vea quede debajo del recorte.

5. Marca el borde exacto que quieres mostrar en tu foto. Estas marcas te indicarán por dónde debes cortar la foto.

6. Corta tu foto siguiendo las marcas que has hecho, asegurándote de que encaje perfectamente dentro del relicario.

7. Aplica una pequeña cantidad de pegamento en la parte posterior de la foto. No necesitas mucha cantidad, solo lo suficiente para que la foto se adhiera al relicario.

8. Coloca la foto dentro de tu relicario. Asegúrate de que la foto esté bien centrada y de que se vea la parte que quieres mostrar.

3era Tecnica:

• Materiales:
  • Relicario
    
  • Almohadilla de sellos ó pincel con pintura
  • Trozo de papel.
  • Tijeras
  • Lapiz
  • Pegamento liquido o en barra

1. Toma tu relicario y una almohadilla para sellos. La almohadilla para sellos te ayudará a marcar las dimensiones correctas de tu relicario en un pedazo de papel blanco.

2. Usa la almohadilla para sellos para marcar los bordes de tu relicario en el papel blanco. Estas marcas te servirán como guía para saber el tamaño exacto que debe tener la foto.

3. Recorta el papel blanco siguiendo las marcas que has hecho con la almohadilla para sellos. Este recorte te servirá como plantilla para recortar tu foto.

4. Limpia cualquier exceso de tinta de tu relicario. Puedes hacerlo con el pañito de limpiar joyas que te enviamos en tu empaque.

5. Coloca el recorte del papel blanco sobre tu foto. Asegúrate de que la parte de la foto que quieres que se vea quede debajo del recorte.

6. Marca los bordes deseados de tu foto. Estas marcas te indicarán por dónde debes cortar la foto.

7. Corta tu foto siguiendo las marcas que has hecho. Intenta hacerlo con cuidado para que los bordes queden lo más limpios posible.

8. Aplica una pequeña cantidad de pegamento en la parte posterior de la foto. No necesitas mucha cantidad, solo lo suficiente para que la foto se adhiera al relicario.

9. Coloca la foto dentro de tu relicario. Asegúrate de que la foto esté bien centrada y de que se vea la parte que quieres mostrar.

Recuerda que si la foto no encaja perfectamente dentro del relicario, puedes hacer unos pequeños ajustes hasta que encaje correctamente.

Si lo deseas tambien puedes ver nuestro video en donde te explicamos haciendo gtodo el proceso, pinchando aqui

Te invitamos a apreciar y explorar nuestros hermosos Relicarios Disponibles.